Los Varguitas de Puebla
* Solidaridad con familiares y amigos de Selene Ríos Andraca q.e.p.d
Será el próximo miércoles cuando se conozca el futuro de los integrantes del Ayuntamiento de San Martín Texmelucan, ante el incumplimiento de pago por el predio en el que se ubica el tianguis de los martes.
A unas horas de que concluya la prórroga de 10 días establecida por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), en las oficinas municipales hay hermetismo, mientras esperan que los asesores del munícipe saquen “bajo la manga” un nuevo recurso legal que pueda mantener la estructura administrativa.
Quienes ya piden la salida del munícipe son los ciudadanos que se han visto afectados o por el comercio informal o por la delincuencia, o si no, por la falta de obras públicas que resuelvan servicios básicos.
Lo que más ha molestado a los texmeluquenses son los altos salarios del presidente y su gabinete, aun cuando éstos conocen la situación económica por la que atraviesa el municipio. De acuerdo con el tabulador disponible en la página de Transparencia, el presidente tiene un salario mensual neto de 42 mil pesos, mientras que los regidores perciben 36 mil 750 pesos.
Además, aunque se supone que el cargo de titular del DIF es honorario, en el actual gobierno la señora Emilia Sofía García Díaz –esposa de Núñez Ramírez- fue nombrada como Directora General con categoría de “Dirección A”, por lo que recibe un salario mensual de 24 mil pesos.
De igual forma, todos los funcionarios del gabinete municipal perciben una “gratificación” anual equivalente a un mes de salario y 25 por ciento más de “primas”.
El caso de Núñez Ramírez, es muy similar a la del presidente de Izúcar de Matamoros, Manuel Madero González, considerado el primer "varguitas” de Puebla, luego de que en su primera ceremonia del Grito de Independencia realizada en 2014, usó una banda presidencial para salir al evento público.
Aunque Madero González no enfrenta un proceso de destitución, ni tiene sumido al municipio en la deuda pública, sí es de los munícipes con los salarios más altos y tiene a su esposa en la nómina, además de que ha sido señalado por cometer actos de nepotismo y presunto desvío de recursos.
Más allá de la poca confianza que inspira hacia sus gobernados, los problemas que enfrenta el izucarense son más bien de violencia e inseguridad, un tema que da visos de incapacidad para mantener la gobernabilidad en su territorio.
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