La consulta popular fue... ¿Un fracaso?
Con sólo 7.74 por ciento de participación ciudadana como máximo, este domingo se realizó la consulta popular para enjuiciar a los expresidentes de México, en la que 96.28 por ciento de los participantes dieron su aprobación. La cifra es insuficiente para ser vinculante (obligar) a los poderes Ejecutivo y Legislativo a emprender acciones legales en contra de los “actores políticos” del pasado.
El juicio a expresidentes fue una propuesta planteada por el ahora presidente Andrés Manuel López Obrador desde su campaña de 2018, pero dejada casi en el olvido durante los dos primeros años de su mandato, hasta las vísperas de la elección intermedia de 2021. La intención del mandatario era realizar la consulta a la par de las elecciones federales, pero esto no fue permitido por el Instituto Nacional Electoral (INE) por las implicaciones políticas que conllevaría.
Finalmente, la consulta realizada el 1 de agosto, a casi un mes de las elecciones, terminó desechando la propuesta de campaña, al no conseguir el 40 por ciento de la participación del Padrón Nominal, calculado en 93 millones 500 mil electores y evidenciando el voto duro de la cuatroté en México, esto es, alrededor de 7.2 millones de ciudadanos.
Contrario al fracaso, la consulta popular se convirtió en un instrumento para despresurizar la presión social en torno a los casos de corrupción del pasado reciente en México, pero además fue aprovechada por López Obrador para quedar eximido de la responsabilidad de llevar a la cárcel a “los expresidentes corruptos”, como él mismo lo sigue expresando en la tribuna presidencial. La decisión, de esta forma, quedó en el “pueblo bueno”.
En términos democráticos, la consulta popular sienta un precedente para México que nunca se había realizado y que aparece como un instrumento para la participación ciudadana en la toma de decisiones, con posibilidad de llegar a ser, incluso, un referente de cambio en temas trascendentales, pero no por ahora.
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El gobernador Miguel Barbosa Huerta no descartó la posibilidad de realizar en Puebla una consulta popular como la que se llevó a cabo este domingo, así lo dejó entrever durante su visita a la ciudad de Tehuacán, donde emitió su voto.
Cuestionado por reporteros sobre si la consulta podría aplicarse para termas como el regreso a las aulas en medio de la tercera ola de Covid-19, el gobernador descartó esa posibilidad porque eso es un tema que ya fue anunciado por el presidente López Obrador. Y es que la semana pasada el mandatario federal confirmó que habrá regreso a las aulas “llueva, truene o relampaguee”.
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